Uno de los principales anhelos de la vida es tener una vida saludable, en lugar de dejarlo en manos del destino, elige hábitos que ayuden a tu bienestar físico, emocional y psíquico.
Muchas veces nos encontramos de médico en médico, de gimnasio en gimnasio. Buscamos con frecuencia terapias alternativas, soluciones a nuestro estrés, al insomnio o al sobrepeso. Al final de cuentas, tener una vida saludable, depende sólo de nosotros, en dedicar un poco de nuestro valioso tiempo a cuidar de nuestro cuerpo. Comprender que nuestro organismo es pieza fundamental para vivir en mejores condiciones nuestro recorrido a diario, nos ayudará a ser más felices. A continuación te dejo unos consejos prácticos para tener una vida saludable.
6 consejos prácticos para llevar una vida sana:
1. Caminar, es una alternativa para mejorar la salud física sino también a nivel psíquica. Caminar al menos una hora diaria, nos aporta muchos beneficios al corazón, los pulmones y los músculos del cuerpo. Además trae paz al espíritu, caminar activa e incremente nuestra creatividad y disipa los problemas y preocupaciones. Es un buen antídoto contra la depresión, la ansiedad y el estrés.
2. Descansar, diferentes estudios ha demostrado el poder curativo de la siesta. La razón de este efecto positivo en la buena salud, proviene de que la siesta provoca cambios en la presión arterial y disminuye la frecuencia de los latidos del corazón. Durante la siesta, entran en acción los mecanismos que provocan un trabajo más reposado de las funciones del corazón y en consecuencia, una disminución de los riesgos cardíacos. Es un hábito saludable que disminuye el estrés y es beneficiosa para la salud. Los médicos recomiendan una siesta de corta duración, de entre 10 y 20 minutos.
3. Practicar un ejercicio saludable, por ejemplo el Yoga, el yoga es una práctica milenaria recomendanda para todas las edades, jóvenes, personas mayores, mujeres embarazadas y niños. Está demostrado que a través de ejercicios respiratorios,las posturas y la meditación, se provoca un estímulo reflejo del sistema nervioso parasimpático. Esto produce una reducción en los latidos del corazón y una relajación de los músculos. Además, una mayor oxigenación del cerebro tiende a normalizar la función cerebral, reduciendo niveles excesivos de ansiedad y reduciendo la carga de trabajo del corazón, como efecto produce un corazón más fuerte y más eficiente.
4. Desayunar bien, Un buen desayuno debe cubrir el 30% de los nutrientes que necesita el organismo para funcionar correctamente durante el día."Desayuna como rey, come como príncipe y cena como mendigo". El desayuno es la comida más importante del día, Para que el desayuno sea equilibrado debe incluir:
- Lácteos: leche, yogur, queso, aportan proteínas, calcio, hierro y zinc.
- Cereales: Los cerealies en copos, galletas o pan nos aportan los hidratos de carbono necesarios en nuestra dieta.
- Frutas:aportan las vitaminas y fibras necesarias para el organismo.
- Proteínas: son necesarias para nuestra nutrición, se clasifican en proteínas de origen animal y proteínas de origen vegetal. Las de origen animal en los huevos, aves, pescados, carnes y productos lácteos. Las proteínas de origen vegetal se encuentran en la soja, frutos secos, champiñones, legumbres y cereales.
5. Cultivar el optimismo, pensar en forma positiva y vivir con alegría, nos brinda longevidad y una vida más saludable. Ser feliz es un estado emocional que está al alcance de nuestras manos. Estudios sugieren que la felicidad y las emociones positivas como la alegría y el optimismo son factores que pueden ayudar a prevenir enfermedades mejorando nuestro nivel de bienestar, plenitud y satisfacción.
6. Cultivar la gratitud, muchas veces nos enfrentamos a situaciones que no podemos remediar, pensar que somos desdichados, heridos o fracasados no ayuda a vivir sanamente. Comprender y aceptar la vida tal cómo se nos presenta, con sus éxitos y fracasos, ser agradecidos por los procesos de la vida, evitando sentimientos negativos hacia otras personas y hacia nosotros mismos, nos aporta estabilidad emocional y nos ayuda a vivir cada día de forma más saludable.
Los estados emocionales positivos conjuntamente con una buena alimentación, el ejercicio físico y un buen descanso, reflejarán en nuestro cuerpo una vida sana, además de aportar una gran sensación de bienestar, salud física y emocional. Además, realizar prácticas que nos generen una sensación de paz y mantener una actitud positiva ante la vida, nos permite sonreír fácilmente y vivir cada día con alegría.
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